Hablemos de vacunas desde la ciencia y el conocimiento.

Documento de consenso de Sociedades y Asociaciones Científicas frente a la “desinformación” sobre las vacunas

• En los http://dworzynska.com/academic-help/ últimos tiempos se viene observando un aumento de las declaraciones contrarias a la vacunación.
• En los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) se escuchan argumentos contra las vacunas por parte de profesionales de distintos ámbitos, a contracorriente y puede que buscando una notoriedad que de otra forma no conseguirían.
• El daño realizado por la publicación de Wakefield en Lancet en 1998, relacionando la vacuna del sarampión con la aparición de autismo, sigue hoy vigente, a pesar de que su principal autor fue inhabilitado para el ejercicio de la medicina por la falsedad empleada.
• Sólo a las vacunas pueden atribuirse los cambios habidos en pocos años en la incidencia de enfermedades tales como la poliomielitis, la difteria, el tétanos, la tos ferina, el sarampión etc
• La Asociación Española de Vacunología, desde su composición multidisciplinaria, con profesionales de distintos ámbitos de la medicina relacionados con las vacunas, junto con las sociedades científicas firmantes del presente documento, creemos que ha llegado la hora de trabajar desde la unidad de estas sociedades y la administración sanitaria para desarrollar estrategias y actuaciones que hagan posible conseguir la confianza de la población en las vacunas.

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Seguridad de las vacunas. Razones para seguir vacunando

José Antonio Navarro Alonso

CENTRO DE TRABAJO:

Jefe de Servicio de Prevención y Protección de la Salud. Dirección General de Salud Pública. Región de Murcia

INTRODUCCIÓN

Las vacunas han supuesto uno de los grandes logros de la Salud Pública en los últimos decenios. En el año 2003 el descenso porcentual de varias enfermedades inmunoprevenibles en los Estados Unidos de Norteamérica, respecto de los años de máxima incidencia, ha superado el 99% (Tabla 1). Algo similar ha ocurrido en España(Tabla 2).

Paradójicamente, este espectacular descenso, unido a la disminución o a la desaparición de grandes epidemias y a la pérdida del miedo a la muerte o a la discapacidad debido a las infecciones, ha originado que los aspectos relacionados con la seguridad de las vacunas están adquiriendo un gran protagonismo. En el año 1999, en los mismos Estados Unidos, las declaraciones de efectos adversos presuntamente relacionados con la vacunación sobrepasó a la incidencia de la mayoría de enfermedades inmunoprevenibles declaradas (Tabla 3). Mientras que la historia sugiere que esta secuencia de acontecimientos es previsible, la experta utilización de los medios de comunicación y de Internet en una época de globalización, permite ejercer una enorme influencia a los grupos “antivacunas” que alimentan la preocupación del público y de los medios respecto a la seguridad de las vacunas.

La seguridad de las vacunas, por tanto, centra la atención de la población. Esto es debido a que los ciudadanos esperan de las vacunas altos estándares de seguridad por los siguientes motivos: a) al contrario que las decisiones clínicas que generalmente se dirigen a una persona concreta en un momento determinado, las decisiones de Salud Pública afectan a poblaciones enteras, b) la obligación moral de “primum non nocere” es mayor para la Salud Pública que para la Clínica, c) las vacunas se administran como medidas preventivas a individuos habitualmente sanos, vacunas suelen recomendarse aunque a veces son obligatorias. Leer más

Pandemia de gripe – La respuesta de salud pública

Margarita Viciola. Directora de Salud Pública. Gobierno Vasco

La Salud Pública , como ciencia y arte para organizar y dirigir los esfuerzos colectivos hacia la protección de la salud en una comunidad, se conoce desde hace algo más de un siglo. Sin embargo, desde comienzos de la historia de la humanidad, los pueblos han llevado a cabo actuaciones de tipo “preventivo y de control”.

Desde Hipócrates a nuestros días se han producido una serie de “pandemias”, como la peste bubónica, causante de 2 millones de muertos en la Edad Media. En el siglo XX se produjeron 3 pandemias de gripe, siendo la de 1918 la más importante, que se desarrolló entre 1918 y 1919 en 2 ondas epidémicas.

PANDEMIA DE 1918

La pandemia de 1918 irrumpe durante las etapas finales de la primera guerra mundial. Con un cuarto de la población de EEUU y un quinto de la población mundial infectada con la gripe, era imposible escaparse de la enfermedad. El mismo presidente Woodrow Wilson sufrió la gripe cuando negociaba el tratado crucial de Versalles para terminar la guerra mundial.

Los métodos más restrictivos de control de la infección decretados por las autoridades sanitarias fueron las cuarentenas y el aislamiento de los enfermos. Estas medidas requirieron un sacrificio de la libertad individual por el bien social.

Las condiciones creadas por la guerra propiciaron una respuesta relativamente tranquila de la población ante las medidas restrictivas que se impusieron. La gente tuvo en cuenta que las necesidades de la nación estaban por delante de sus necesidades personales, como durante la guerra, y por lo tanto se sometió de buen grado a medidas que restringían su libertad. Leer más